“Los estilistas estamos para ayudar no para criticar sin justificación”, Irma Martínez

“Los estilistas estamos para ayudar no para criticar sin justificación”, Irma Martínez

Por: Irma Martínez, Estilista y autora del libro El manual del estilista

Me siento muy complacida de que mi participación en la edición de Los Mejor y Peor Vestidos haya iniciado una conversación sobre moda y estilo que era necesario tenerla en Colombia. Como lo dije en su momento, esas “listas” son subjetivas y están abiertas a discusión, pero en mi caso, como estilista, tengo una aproximación profesional diferente a la de un editor, un diseñador, un personal shopper o simplemente un amante de la moda. 

Para los que no están familiarizados con el término o todavía lo confunden con los profesionales del cabello, el estilista es el encargado de desarrollar la imagen de una persona de acuerdo con su estilo de vida y su entorno, de esta forma contribuimos a crear una identidad única que se refleje en la marca personal de cada uno. Es algo que va más allá del buen gusto y el buen vestir... Los estilistas usamos la moda como una herramienta de comunicación, bien sea de un político, un artista, un gerente o una joven ejecutiva que inicia su vida laboral. 

Cuando empecé mi carrera en Estados Unidos, nuestra profesión no era tan influyente como ahora. Incluso, los artistas con los que trabajaba ni siquiera reconocían nuestro talento y se tomaban los créditos por sus celebrados looks. ¡Cómo han cambiado los tiempos! Hoy los estilistas somos una parte importante de la industria de la moda y trabajamos con personalidades y con marcas, para proyectar su imagen y comunicarlas al público.  

En la moda, específicamente, somos una especie de puente entre las tendencias que salen de la pasarela y el street style y estamos perfectamente sintonizados con las necesidades, expectativas y deseos de los consumidores de esta industria. Que muchas estilistas se hayan convertido en celebridades es simplemente una validación de la popularidad de la profesión y el nivel de su influencia. Rachel Zoe, Nicola Formichetti y Carine Roitfeld son solo algunos ejemplos. En el caso de esta última, pasó de ser la estilista de Tom Ford en su época en Gucci a editora de Vogue Francia y luego consolidó su papel como trendsetter a través de múltiples plataformas, incluyendo su propia publicación. 

Nosotros, los estilistas, estamos para ayudar no para criticar sin justificación. Estamos para contribuir a que las personas conviertan sus looks en herramientas para triunfar, no simplemente para recibir likes por nuestros looks en las redes sociales. Los estilistas somos una fuerza creativa de la industria, generadores y validadores de tendencias, no simples fashionistas. Nosotros hemos convertido nuestra pasión por la moda en nuestra profesión para innovar y ayudar a los demás. Ese espíritu constructivo, fue lo que me llevó en esa edición especial, a incluir tips y consejos, que espero los personajes incorporen en su presentación y que ustedes hayan tomado nota.

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