¿Sufres de acné? El bicarbonato de sodio puede ayudarte a tratarlo: así se usa

El acné es una condición cutánea común que afecta a personas de todas las edades y géneros. Aunque existen numerosos tratamientos disponibles en el mercado, algunos optan por soluciones más naturales y accesibles, como el bicarbonato de sodio.

¿Qué hay detrás de este ingrediente de cocina aparentemente simple? ¿Realmente puede ayudar a combatir el acné de manera efectiva?

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Los beneficios del bicarbonato de sodio para la piel con acné

Uno de los beneficios más destacados del bicarbonato de sodio es su capacidad para exfoliar suavemente la piel. Al aplicarlo en forma de pasta sobre las áreas afectadas por el acné, el bicarbonato de sodio ayuda a eliminar las células muertas de la piel y a desobstruir los poros, lo que puede reducir la aparición de brotes.

Además de su acción exfoliante, el bicarbonato de sodio también tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas. Esto significa que puede ayudar a reducir la inflamación asociada con el acné y combatir las bacterias que causan las espinillas y los puntos negros.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que el bicarbonato de sodio puede no ser adecuado para todos los tipos de piel. Su naturaleza alcalina puede alterar el equilibrio del pH de la piel, lo que puede causar irritación, sequedad y sensibilidad. Por esta razón, es crucial realizar una prueba de parche en una pequeña área de la piel antes de aplicar bicarbonato de sodio en todo el rostro.

El acné afecta especialmente en la adolescencia, aunque no es una condición ajena a los adultos.

Fotografía por: Getty Images

¿Cómo usar el bicarbonato de sodio para el acné?

Si decides probar el bicarbonato de sodio como tratamiento para el acné, aquí tienes algunas formas de usarlo de manera segura y efectiva:

Mascarilla de bicarbonato de sodio

Mezcla bicarbonato de sodio con agua hasta formar una pasta suave. Aplica la mezcla sobre las áreas afectadas por el acné y deja actuar durante unos 10-15 minutos antes de enjuagar con agua tibia.

Exfoliante de bicarbonato de sodio

Combina bicarbonato de sodio con un poco de aceite de coco o miel para crear un exfoliante suave. Masajea suavemente la mezcla sobre la piel húmeda en movimientos circulares, luego enjuaga con agua tibia.

Tratamiento de puntos negros

Haz una pasta con bicarbonato de sodio y agua y aplícala directamente sobre los puntos negros. Deja que la pasta se seque antes de enjuagarla con agua tibia. Esto puede ayudar a desobstruir los poros y eliminar las impurezas.

Baño de bicarbonato de sodio

Añade una taza de bicarbonato de sodio al agua del baño y sumérgete durante 15-20 minutos. Esto puede ayudar a calmar la piel irritada y reducir la inflamación causada por el acné.

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Aunque el bicarbonato de sodio puede ser una herramienta útil en el tratamiento del acné, es importante usarlo con precaución y en combinación con otros cuidados para la piel, como limpiadores suaves, humectantes no comedogénicos y protector solar.

Si experimentas irritación o efectos secundarios, suspende su uso y consulta a un dermatólogo.