Pies: ¿Mojarlos con agua fría ayuda a mejorar la circulación?

Cambiar tu dieta no hará que el problema de venas varices u otras complicaciones con el sistema circulatorio desaparezcan por completo, pero sí notarás como tus condiciones de salud mejorarán al incluir estos 5 alimentos en tu alacena.

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Las duchas de agua fría ayudan a mantener la piel hidratada, tersa y sí, también aportan para tener una buena circulación.

¿Cómo mejorar la circulación rápida?

Las largas jornadas laborales, el uso de tacones y el estrés del día a día van lastimando tus pies y aunque no lo notes inmediatamente, con el tiempo te darás cuenta de algunos daños irreparables.

De acuerdo con la Clinica Vasculine de España “las duchas frías si son capaces de mejorar la circulación ya que el agua fría provoca vasoconstricción que es la construcción de los vasos sanguíneos, lo que neutraliza la vasodilatación. Mediante la vasoconstricción se logra aumentar la presión que ejerce la sangre sobre las paredes de las venas y por consecuencia, la sangre fluye más fácilmente hacia el corazón”.

Muchas personas creen que mojar los pies con agua fría ayuda a mejorar la circulación pero ¿es verdad?

Fotografía por: Archivo EE

Además, la presión del agua “ayuda contrarrestar la presión de las venas de manera que se genera un efecto drenantes beneficioso para la circulación de la sangre cuánto más fría se encuentre la temperatura del agua mayor será su efecto compresivo”.

Combinar duchas frías y calientes para estimular la circulación sanguínea

El frío y el calor tienen distintos usos pero en el caso del agua alternar las temperaturas está indicado para mejorar nuestra circulación

• Agua fría: provoca que los vasos sanguíneos se encojan reduciendo en gran medida de las posibilidades de inflamaciones o congestiones más superficiales.
• Agua caliente: dilatan los vasos sanguíneos consecuencia de las altas temperaturas y favorece la transpiración por lo que los músculos y articulaciones se relajan.

De acuerdo con la web Mejor con Salud poner los pies en agua fría ayuda para “fortalecer el sistema inmunitario, además del cardiovascular, según afirma este estudio realizado por el Academic Medical Center (Amsterdam)”.

Según lo destacado por la web para que nuestras defensas estén listas para cuidarnos de los ataques de los virus y bacterias es preciso que “entrenen” exponiéndolas a una situación similar como sucede con las vacunas.

“Cuando nuestro sistema inmunitario sabe de qué manera hacerle frente a los cambios de temperatura de los pies tiene la capacidad para evitar todo tipo de enfermedades relacionadas con el frío. Cabe destacar los pies son los primeros que se enfrían en invierno o cuando llueve”, destaca la web.

Cuando retiramos los pies del agua congelada “necesitan sangre “nueva” o limpia para aumentar la temperatura lo antes posible. Esta reacción del cuerpo puede ser lo que necesitamos para evitar la inflamación, el dolor y demás problemas”, señaló Mejor con Salud.

A su vez permite que los músculos inferiores se vigoricen al llenarse de oxígeno y que las células funcionen mejor.

A diferencia de lo que se piensa “no es el agua fría o las bajas temperaturas que experimentan los pies los que curan. Sino lo que el organismo debe hacer para producir calor y revertir esa situación “peligrosa””, destacó.

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